Francisco Cerúndolo, número 27 del mundo, se clasificó ayer a octavos de final de Roland Garros tras eliminar al estadounidense Tommy Paul (Nº 14) por 3-6, 6-3, 6-3, 6-2.
El tenista de 25 años iguala así su resultado obtenido el año pasado y estaba muy atento a la sesión que anoche enfrentaba al serbio Novak Djokovic (Nº 1) con el italiano Lorenzo Musetti (Nº 30), de la que salía su próximo rival.
Esta era la sexta ocasión en la que Cerúndolo y Paul se veían las caras, un mes después de que el bonaerense eliminara a Paul en tercera ronda del Masters 1000 de Madrid.
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Ayer se impuso por cuarta ocasión pese a perder el primer set, ganando con contundencia los tres siguientes y cerrando el partido en 2 horas y 50 minutos.
El resto. El alemán Alexander Zverev, Nº 4 del mundo y semifinalista de Roland Garros las tres últimas ediciones, evitó la eliminación contra el neerlandés Tallon Griekspoor (Nº 25), al que derrotó 3-6, 6-4, 6-2, 4-6, 7-6 (10/3).
Luego de 4 horas y 14 minutos, el tenista de 27 años, que se impuso en el Masters 1000 de Roma hace quince días, logró certificar el pase a octavos de final por séptima temporada consecutiva.
Protegido de la lluvia bajo el techo retráctil de la pista central Philippe Chatrier, el alemán recibió un jarro de agua fría en el primer set ganado por Griekspoor, una declaración de intenciones de la batalla que iba a presentar el neerlandés.
Zverev, verdugo de Rafael Nadal en la primera ronda, ganó las dos siguientes mangas, pero Griekspoor volvió a igualar el partido forzando un quinto set en el que llegó a ir hasta 4-1 por delante.
En ese momento el tenista alemán reaccionó, logró remontar el set y, pese a que Griekspoor forzó el tie-break, Zverev reencontró su sangre fría para poner punto y final a un partido en el que olió de cerca el peligro de una temprana y decepcionante eliminación.
Con menos sufrimiento firmó su boleto a octavos el ruso Daniil Medvedev (N° 5) contra Tomas Machac (N° 34), si bien el checo logró arañar un set e intentó complicar la vida al máximo a su rival.
Sabalenka-Badosa, enemigas íntimas
Aryna Sabalenka se impuso a Paula Badosa en la tercera ronda del Abierto de Francia, en un enfrentamiento entre dos grandes amigas, mientras que Varvara Gracheva, nacida en Rusia, se ganó un gran número de admiradores franceses al defender la bandera de su país de adopción.
Sabalenka y Badosa son amigas íntimas, pero ayer dejaron a un lado sus simpatías antes del séptimo enfrentamiento de su carrera, que prometía llegar hasta el final después de un apretado primer set.
Pero la bielorrusa selló la victoria por 7-5 y 6-1. “En la pista somos rivales, pero fuera de ella somos amigas”, comentó Sabalenka después del partido.