¿Clubes o Sociedades? El debate central, la profesionalización de la gestión del deporte

Ya es una realidad. Se habilitó a los clubes a transformarse en sociedades anónimas y que el capital privado pueda ingresar en el fútbol, según la Resolución General 18/2024 de la Inspección General de Justicia.

De esta manera se autoriza un modelo de gestión del deporte que es una realidad en países con un alto desarrollo del deporte y que coexiste con las Asociaciones Civiles Deportivas. Sin embargo, en la Argentina era, y sigue siendo, un tema tabú.

Córdoba: en FM Radio Popular se mantiene líder, Cadena 3 detiene su caída y Heat recupera la posición perdida

En el país existen 11.482 clubes, según el Relevamiento Nacional de Clubes y Entidades Deportivas. Surge siempre la incómoda pregunta sobre si las SAD son una opción o no para mejorar los rendimientos de unos 110 clubes de fútbol profesionales que estarían siendo alcanzados por la nueva normativa.

Pero el análisis debe ser más amplio y se deben evaluar las posibilidades de aplicación y convivencia de estos sistemas.

En el ámbito internacional, existen diferentes modelos de combinaciones de SAD y Asociación Civil Deportiva (ACD). En Europa y América Latina, se ha adoptado la convivencia entre estas, a excepción de Inglaterra, que los clubes de fútbol son SAD plenas. Al margen de los aspectos legales o mediáticos, quizás lo importante es de destacar y valorar algunas cuestiones para la gestión en estos tipos de organizaciones.

Las Asociaciones Civiles Deportivas (ACD)

En las Asociaciones Civiles Deportivas sin fines de lucro se destacan aspectos positivos y negativos. Entre los positivos, se encuentran su compromiso con la comunidad, su flexibilidad y adaptabilidad, y su participación democrática.

Estas organizaciones suelen arraigar fuertemente en la comunidad, están dirigidas por voluntarios y están dedicadas al desarrollo deportivo y social.

Además, al no tener fines de lucro, pueden centrarse en sus objetivos sociales y deportivos, siendo más flexibles y adaptativas; al tiempo que promueven la participación de sus miembros en la toma de decisiones, fortaleciendo la democracia interna.

Fue a ver la final a la tribuna y terminó festejando con los bicampeones: la hazaña de un hincha cordobés

Sin embargo, en contrapartida, presentan limitaciones financieras, dependencia excesiva del voluntariado y falta de gestión y profesionalización.

La dependencia de cuotas de membresía, donaciones y patrocinios puede limitar la inversión en instalaciones y programas. La falta de recursos financieros puede resultar en una dependencia excesiva del voluntariado, dificultando la operación y el crecimiento de la asociación. Por último, la informalidad, la falta de experiencia gerencial, y de recursos financieros puede obstaculizar la gestión efectiva.

Sociedades Anónimas Deportivas (SAD)

Las Sociedades Anónimas Deportivas, también exponen una serie de factores que indican amenazas y oportunidades para el club. Entre las amenazas se encuentran el desconocimiento y la resistencia al cambio, la complejidad en la implementación y el riesgo de litigiosidad.

La resistencia al cambio puede surgir de la falta de comprensión o aceptación de las nuevas responsabilidades y obligaciones impuestas por la ley. La complejidad en la implementación puede generar dificultades operativas y administrativas debido a cambios significativos en la responsabilidad personal y solidaria para los cargos directivos y de fiscalización.

Además, el aumento del riesgo de litigiosidad puede derivar de disputas sobre rendición de cuentas y el cumplimiento de los fines de los recursos.

Cifras del aborto en 2023: las 106.331 interrupciones de embarazos en el país igualan a la población de Villa María y Villa Nueva juntas

Por otro lado, las oportunidades como una mayor transparencia y rendición de cuentas, incentivos para la formalización y apoyo financiero y beneficios impositivos son los puntos fuertes de este modelo.

La mayor transparencia y rendición de cuentas pueden mejorar la gobernanza interna y fortalecer la confianza de los miembros y financiadores externos.

La formalización incentivada por la ley podría llevar a una mayor profesionalización del sector y facilitar el acceso a recursos estatales y otros beneficios. Los beneficios impositivos y financieros fortalecerían la sostenibilidad financiera de las organizaciones deportivas y promover su desarrollo a largo plazo.

En resumen, tanto las SAD como las Asociaciones civiles deportivas sin fines de lucro tienen sus ventajas y desafíos. La elección entre ambos modelos depende de diversos factores, como las necesidades y objetivos específicos de la organización, así como el entorno en el que opera.

Las SAD pueden ofrecer una mayor capacidad para atraer inversión y financiamiento, así como una estructura más profesionalizada. Por otro lado, las asociaciones civiles deportivas destacan por su compromiso comunitario y flexibilidad. Ambos modelos enfrentan desafíos financieros y de gestión que deben abordarse para garantizar su éxito a largo plazo.

Antes de decidir cuál es el modelo de gestión más adecuado para una entidad deportiva, ya sea una Sociedad Anónima Deportiva (SAD) o una Asociación Civil Deportiva (ACD), es importante ciertos aspectos: los objetivos y valores de la organización, la naturaleza y el tamaño, las consideraciones legales y fiscales, la transparencia y la sostenibilidad financiera, la gobernanza y la estructura organizacional y la participación de la comunidad.

El profesionalismo en las estructuras organizativas del club es fundamental en la toma de decisiones. Esto incluye la formación de los miembros, así como consultoría y soporte técnico. Estos recursos ayudan a mejorar la gestión y eficiencia de los clubes, asegurando un entorno óptimo para el desarrollo de sus actividades.

Estas medidas permitirán a los clubes comprender mejor las implicaciones de cada modelo y tomar decisiones que contribuyan al desarrollo y crecimiento sostenible del deporte en la comunidad.

 

(*) Daniel Di Donato – Director de la Licenciatura y la Diplomatura en Gestión Deportiva de la Universidad Blas Pascal.

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *