Varios jugadores uruguayos, entre ellos Darwin Núñez (delantero del Liverpool), José María Giménez (central del Atlético de Madrid) y Ronald Araújo (defensa del Barcelona), saltaron a la grada para pelear con hinchas colombianos una vez finalizado esta madrugada el partido de semifinales de la Copa América entre Uruguay y Colombia. Al final de los 90 minutos hubo una trifulca entre jugadores de las selecciones, que se reprodujo en la grada entre hinchas de los dos países. Núñez, Araújo, Giménez y otros jugadores de la selección de Uruguay saltaron a la grada para implicarse en la pelea entre hinchas mientras les llovían objetos y líquidos. La trifulca duró varios minutos mientras los esfuerzos de la policía eran inútiles para separar a los implicados.
Según Giménez, capitán de la selección uruguaya, los jugadores de la Celeste saltaron a la grada y se vieron involucrados en una pelea con aficionados colombianos para defender a sus familias, “que corrían peligro”. “Tuvimos que meternos a la tribuna a sacar a nuestros seres queridos, con bebés chiquitos y recién nacidos. Un desastre todo. No había ni un solo policía, cayeron a la media hora. Un desastre todo y nosotros ahí dando la cara por los nuestros”, dijo Giménez en declaraciones televisivas tras concluir la semifinal de la Copa América en la que Colombia derrotó por 0-1 a Uruguay.
En las imágenes publicadas en redes sociales se puede ver a Darwin Núñez con los puños en alto. El delantero del Liverpool recibió un puñetazo en el rostro de un aficionado colombiano. El defensa del Atlético de Madrid explicó que lo que trataban era de proteger a los familiares que habían acudido a ver el encuentro. “Ojalá que los que están organizando esto tengan un poco más de cuidado con las familias, con la gente y con los alrededores de los estadios, porque esto es un desastre, porque todos los partidos pasa lo mismo”, dijo.
El partido se disputó en el Estadio Bank of America, en la ciudad estadounidense de Charlotte. Estados Unidos, además de organizar la Copa América, también se encargará de albergar el Mundial de Clubes del año que viene y es uno de los tres países —junto con México y Canadá— encargados de la organización de la Copa del Mundo de selecciones en 2026.
“Nuestras familias están sufriendo por culpa de los que se toman todos los traguitos de alcohol, que no se saben tomar, que se comportan como unos niños que no tienen noción. Ojalá que tengan precaución y no vuelva a suceder, porque esto es un desastre”, añadió Giménez, visiblemente alterado.
El seleccionador de Uruguay, Marcelo Bielsa, afirmó que las peleas en las que estuvieron involucrados sus jugadores fueron unos incidentes “verdaderamente lamentables”. Bielsa aseguró en una rueda de prensa que no vio los incidentes en la grada porque se dirigió a los vestuarios cuando terminó la trifulca entre futbolistas en el centro del campo. “Cuando vi que eso se había resuelto, me fui a los vestuarios”, dijo Bielsa, que también explicó que pensó que los jugadores que se dirigían a la grada “estaban agradeciendo al público uruguayo el apoyo”. “Pero luego supe que hubo otro tipo de dificultades lamentables, verdaderamente”, añadió.
La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) “condenó enérgicamente” en un comunicado “los actos de violencia en el fútbol”, aunque evitó referirse directamente a la pelea entre jugadores uruguayos e hinchas colombianos tras la semifinal de la Copa América entre ambas selecciones. “No hay lugar para la intolerancia y la violencia dentro y fuera de la cancha”, afirmó la Conmebol en un comunicado.
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